Mantener la ilusión

Cuando salí al mundo laboral lo hice con mucho entusiasmo y una actitud decidida, y superé un montón de obstáculos en muy poco tiempo.

Pero ya desde el principio fui topando con una serie de personajes que me fueron arrancando pedacitos de ese entusiasmo.

Siempre era lo mismo, empezaba un proyecto, me entusiasmaba con él, empezaba a aportar ideas propias...

Y entonces venía alguien y me obligaba a desmontar la mitad de lo que había hecho.

Pero yo siempre me ponía de mi lado, y aunque mis trabajos no vieran la luz en su forma original, los guardaba para mí.

Aun así, una parte de mí parece convencida de que siempre va a haber alguien que me corte las alas.

Algo tendré que hacer.